miércoles, 15 de mayo de 2013

Comentario final sobre la escultura de Cabestany Piñol

El pintor, el escultor, llamado primitivo, de todos los tiempos y lugares no fué un profesional del arte libre como lo conocemos hoy, siempre estuvo condicionado por los dirigentes políticos y religiososo de su momento histórico. Las obras que realizaba, mas que la expresión de su sentimiento y pensamiento, plasmaba la simbología que ellos le dictaban. La obra de este autor como la gran parte de los colegas de hoy no tiene condicionamientos de ningún tipo. Se ha enamorado de ciertos planteos técnicos expresivos que tienen ciertas obras de arte del pasado y está de acuerdo con las normas que regulan la vida, la convivencia humana, y cuando las refleja en su producci'on, lo hace solamente bajo la presión de su conciencia, su gusto y libertad sabiendo que el arte es una conversación, una conversión entre el creador y el observador y a veces es un discurso sobre lo que siente, piensa y quiere decir a los demás, tomando del legado de la historia lo más trascendente, lo más positivo que, cree puede contribuir a construir un mundo más ético, más armonioso, más feliz...
La actitud de inspirarse en el pasado es común a todas las disciplinas. El artista plástico en algunos casos, por distintos motivos, se enamora, se identifica con expresiones, técnicas, imágenes, mensajes del pasado universal y lo aplica a su obra poniéndole su sello personal a veces sin proponérselo. Este autor desea estar en el hoy que perdura, unido al cordón umbilical del hombre creador y su historia... y por último se siente honrado y feliz de intentar entroncar su producción con las expresiones de América que recibió a toda su familia con los brazos abiertos.
Francisco Cabestany  Piñol. 

1 comentario:

  1. ¡Fantástico este comentario final!
    El Profesor Cabes resume en unas breves palabras su evolución artística y personal a la vez que nos expone su visión creativa. Y todo ello de una manera entrañable, hablándonos desde el corazón.
    El camino aún continúa. ¡Adelante maestro!
    Mora

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